¿Has sentido alguna vez mucho antojo por un chocolate? Esto ocurre porque éste contiene una sustancia llamada feniletilamina, la cual al parecer desencadena sentimientos similares a "estar enamorados".
Además, otro componente del chocolate estimula algunos receptores del cerebro de manera similar a como lo hacen las drogas que ocasionan adicción.
El antojo por el chocolate también se cree que es originado cuando las papilas sensoriales, que detectan el sabor del chocolate derritiéndose en tu boca, hacen que el cerebro produzca endorfinas.
Las endorfinas son las drogas naturales que libera tu cuerpo para que te sientas bien.
Conserva la salud cardiovascular, pero también aumenta el flujo en el torrente sanguíneo y de oxígeno al cerebro, lo que contribuiría a mejorar algunas funciones cerebrales y ayudar a combatir los síntomas del envejecimiento, la fatiga e incluso transtornos del sueño.
A comer chocolate y dejarse llevar......
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